jueves, 23 de enero de 2014

Fernando Mellado: Retrocesos en transporte urbano de Hermosillo

Foto de Camión de SIENTE quemandose en el Blvd. de los Ganaderos el día 23 de Enero de 2014 En los últimos días ha sido bastante evidente la circulación en la Cd. de Hermosillo de Camiones a la vieja usanza; es decir, aquellos de tipo escolar o de transporte de personal usados regularmente importados, con muchos años de uso, adecuados y adornados a modo por sus propietarios. Es irremediable, el verlos circular me transporta al año 2000, cuando no existían los “sistemas” de transporte urbano que promovió en las siguientes administraciones el gobierno estatal. Estoy convencido que la propuesta de modernizar la flota de autobuses, mejorar el servicio y centralizar la operación y servicio a las unidades fue una buena idea que desafortunadamente como muchas cosas en este país fue mal implementada pues no se comprende como la empresa responsable de administrar el sistema de transporte se encuentra en quiebra cuando la operación de cada una de las unidades es un negocio rentable incluso cuando no se cuenta con la ventaja de disponer de las ventajas de la integración y el logro de economías de escala. Completamente de acuerdo también en la intención de estandarizar el servicio, mejorar la atención y brindar mayor seguridad al usuario mediante la capacitación del personal, la asignación o creación de nuevas rutas y otras acciones que no terminaron de consolidarse a poco más de una década de ponerse en marcha. Finalmente no quiero dejar pasar la oportunidad de describir el autobús memorial que vuelve al ruedo: Es de tipo escolar o para transporte de personal usado, importado con muchos años de uso. El espacio en los pasillos es muy angosto lo cual ocasiona amontonamiento. Las ventanas suelen correr verticalmente, lo cual disminuye considerablemente la ventilación. Los chóferes son agresivos, poco atentos con los usuarios y siempre van apurados tratando de cumplir con los tiempos esperados al cubrir su ruta. Cuando el chófer está de humor cobra pasaje medio a estudiantes y personas de la tercera edad. Los arrancones y frenados bruscos son una constante. Es común la música popular a todo volumen. El frente y el espacio en torno al chófer se encuentra decorado con santos, fotografías, leyendas o las frases favoritas del propietario. De noche se encienden las luces interiores que delimitan todos los ángulos y periferia del camión de tal forma que sobresale del resto de los vehículos a cientos de metros de distancia. El chófer suele ir acompañado de un auxiliar o de una joven con quien coquetea en virtud de lo cual presta poca atención a lo que sucede dentro y fuera de la unidad. Una pena que a pesar de los años volvamos más de una década atrás en perjuicio de los usuarios del transporte urbano que desgraciadamente siguen siendo un mercado cautivo que no tiene elección a la hora de movilizarse.

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